Crimen de Miguel Rolón, trabajador de la Municipalidad de La Plata
Murió ayer Miguel Rolón, de 47 años, trabajador del municipio, luego de una golpiza de 4 hombres que bajaron de un auto mientras él cumplía sus tareas y le pegaron hasta dejarlo tendido en el piso. Los atacantes mal interpretaron que Rolón les había sacado un pasacalles cuando en realidad la víctima estaba retirando el pasacalles ya caído y roto por acción del viento. El muerto de la campaña electoral
El ataque a golpes
Antes de ser internado en el Hospital de Gonnet y luego trasladado a una clínica de Villa Elisa donde murió, Rolón llegó a contar el episodio. Lo transmitimos para que se sepa, la Justicia investigue y Miguel, pueda descansar en paz, por un final que no merecía.
Días antes de las elecciones del 13 de agosto el trabajador de limpieza, no de Control Urbano ni nada parecido -sólo de limpieza y mantenimiento- , del Municipio a cargo de Julio Garro, fue golpeado en la rotonda de 7 y 32 por 4 sujetos que descendieron de un auto. Se trató de un malentendido, Miguel, la víctima, se encontraba desempeñando sus tareas, como hace 15 años, cuando decidió apartar un pasacalles caído sobre la vereda que obstaculizaba el tránsito peatonal y podía ser desplazado por el viento hacia la avenida donde circulan los automóviles. Lejos estaba él de simpatizar políticamente con algún partido, menos de participar. De últimas si se pudiera establecer alguna simpatía de su parte con una tendencia, ésta sería el peronismo.
En eso estaba cuando 4 sujetos bajaron de un auto y comenzaron a pegarle entre todos porque creyeron que Miguel les había «arrancado» el pasacalles. Lo patearon en el piso y lo dejaron semi inconsciente tirado y se retiraron. Miguel se quedó un rato tendido, nadie se acercó a asistirlo. Se levantó por sus propios medios y siguió hasta cumplir su horario de salida. Un poco de dolor en el cuerpo y la cabeza no lo preocupó demasiado, es normal que después de golpizas o peleas duelan. No vio sangre, podía moverse y eso bastó. Se fue a su casa.
Al día siguiente, durante el almuerzo con su familia, ésta notó ciertas incoherencias al hablar y la dicción trabada. Lo llevaron al hospital, dónde antes iban los del barrio, dónde nacían los pibes del barrio, dónde nació Miguel. En el nosocomio le descubrieron una grave fractura de cráneo, entre otras heridas que él dejó pasar sin darle importancia.
Estuvo así 2 semanas, hasta ayer que falleció.
Los atacantes
Hay que reconstruir la historia de ese día de la golpiza, quiénes son los 4 golpeadores y que den sus explicaciones del cobarde ataque de 4 contra 1. A quién responden, a para qué partido político golpean. Saber quiénes son aunque sean de UP, eso no importa, hay que encontrarlos. Las cámaras de control civil del municipio, las de domicilios de esos días que filma todo las 24 hs. Si andaban por la zona controlando debían ser de por ahí nomás, de Tolosa. Debe haber, como en todo barrio, 2 o 3 punteros, el accionar cobarde es típico de puntero, no de militantes , así que no es difícil de encontrarlos. Cada puntero debe buscar a sus 4 mulos más cagones y aparecen, quienes de haberse topado con 4 tipos de Control Urbano hubieran filmado, cual niñas youtubers, con un teléfono denunciando ataques a sus carteles y se habrían escondido donde no llega la luz del sol su valentía. En vez de eso, vieron a 1 sólo muchacho de limpieza, y ahí les brotó guapeza.
Golpear 4 contra 1 hasta la muerte no puede representar la ética de ningún proyecto político que pretende hacer mejor la vida para la sociedad. Se hubiera peleado uno de ellos contra la víctima y ahí puede ser, mano a mano, o 4 contra 4. Ahora es tarde y hay que responder. Y el Intendente Julio Garro debe garantizar todo el apoyo a la investigación por el crimen contra un trabajador que anoche fue velado en City Bell. Y los jefes de campaña de todos los partidos políticos también, en especial los del pasacalles supuestamente afectado. De ellos debe bajar la orden para entregar a sus matones. Porque tarde o temprano se va a hallar a los asesinos y va a ser difícil despegarse y hacer creer que no se daban órdenes de violencia y que no había paga en dinero para este tipo de hechos.
Es un crimen a causa de una brutal golpiza como tantos otros crímenes y no murió de insuficiencias propias, sino por un acto de violencia que le partió la cabeza. Es el único asesinado de la campaña electoral PASO 2023.
Miguel Rolón
Pertenecía a una familia numerosa e histórica de City Bell. Asentados en la localidad hace 70 años, cuando todo era campo y se andaba a caballo y en bicicleta, el lechero iba a las casas y los niños jugaban en la calle y potreros tranquilos. Por eso Miguel ligó su vida al fútbol, cómo jugador y dirigiendo, al Centro de Fomento El Ombú de City Bell, un club de fútbol infantil que rescata esa vida pasada del lugar. Con los pibes de El Ombú fue creciendo y tejiendo amistades, compartíó con ellos la escuela 117, caminar y reír por las calles de tierra de cuando eran chicos.